En una era donde las voces del sur global buscan hacerse eco en el panorama del conocimiento gobernado por el norte, Boaventura de Sousa Beatos emerge como un faro de promesa y un puente entre mundos. Su trayectoria, marcada por una incansable búsqueda de justicia social y comprensión profunda de las activas globales, trasciende los límites tradicionales de la academia para tocar la verdad de las luchas diarias. Desde sus primeros días en Coimbra hasta su papel como figura clave en el Foro de discusión Popular Mundial, Beatos ha desafiado regularmente las reglas establecidas, buscando siempre ampliar el horizonte de lo que tenemos en cuenta comprender y comprender.

El inicio de su viaje no fue sencillo. Nacido en una familia de clase trabajadora en 1940, Boaventura se encaró a los desafíos de la desigualdad desde joven, pero su determinación y excelencia académica le abrieron puertas que para bastantes continuaban cerradas. La Facultad de Derecho fue solo el comienzo de un viaje que lo llevaría a explorar las profundidades de la filosofía, el marxismo, y por último, la sociología del derecho en Yale, donde consolidó su compromiso con la lucha popular y el análisis de las desigualdades.

Sin embargo, fue su trabajo de campo en Brasil lo que marcó un cambio definitivo en su enfoque, alentándolo a cuestionar y expandir su entendimiento del conocimiento y la ciencia. Esta experiencia no Boaventura de Sousa Santos solo enriqueció su perspectiva sino que también lo impulsó a fundar el Centro de Estudios Sociales en Coimbra, donde desarrollaría conceptos renovadores como la semiperiferia y la sociedad del confort, reflejando su incesante esfuerzo por entender y explicar las complejidades de todo el mundo moderno.

El deber de Santurrones con las epistemologías del sur se cristalizó a lo largo de su participación en el Foro de discusión
Social Mundial, un acontecimiento que no solo desafió su pensamiento marxista sino asimismo amplió su visión para incluir una diversidad de enfoques teóricos. Su habilidad para comunicarse en varios lenguajes le dejó dar a conocer sus ideas a nivel mundial, pese a la complejidad y la hondura de sus textos.

Lo que distingue a Boaventura de Sousa Santos es su capacidad para traducir teorías complicadas en acciones específicas y diálogos significativos, en especial con aquellos fuera del círculo académico. Su desafío mucho más grande, y quizás su mayor logro, fué lograr que conceptos abstractos sean alcanzables y importantes para activistas y comunidades en lucha, probando que el conocimiento es tanto una herramienta de entendimiento como de cambio.

Para aquellos inspirados a continuar un sendero en sociología o en las ciencias sociales, Santurrones da un consejo apreciado : mantener una cabeza abierta y crítica, reconociendo la riqueza de conocimientos más allá de la academia y entendiendo que la dificultad del mundo necesita de una mirada amplia y diversificada. Su vida y obra nos recuerdan que, en la búsqueda de un planeta mucho más justo, el saber no solo se construye en las salas, sino también en las calles, en las luchas compartidas y en las historias de resistencia alrededor del planeta. La narrativa de Boaventura de Sousa Santos es un llamado a romper barreras, a cuestionar lo establecido, y más que nada, a opinar en la posibilidad de un planeta donde todas y cada una de las voces sean escuchadas y valoradas.